lamas, sufíes, sopranos por la paz...

Por aquello de las casualidades en las que no creo cuando ayer salí de casa me encontré a unos lamas tibetanos vestidos de rojo. Eran muy jóvenes, llevaban mochilas inmensas y llamaban la atención en el barrio sencillo donde vivo. Sorprendida, les pregunté hacia dónde iban y me contaron que en una hora daban un concierto por la paz en el centro de Madrid. Allí nos fuimos. La sala estaba repleta de gente común. Oficinistas, profesores, amas de casa y algún que otro místico meditativo que cerraba los ojos cuando cantaban. La soprano Monica de Luz cantó canciones paganas y ellos hicieron armónicos en una sala sobresaturada de centro cultural. Monica cantó el Gracias a la vida que me ha dado tanto y ellos se despidieron con su agradecimiento ritual. Al marcharme quise saber más. Hablé con una de las mujeres que organizaba aquello y me contó que era francesa, pero que en su grupo había gente de todos los países, gente que trabajaba para el encuentro de culturas desde las religiones. Gente que creía en que había llegado el momento de unir en vez de separar. Sobre la mesa estaban los folletos para los próximos conciertos: Grupos sufíes, lamas celebrando todo su ritual...Estábamos en el espacio Ronda y la mujer insistía en que toca unir. Me llevé el recuerdo de los lamas tibetanos cantando armónicos sobre el sonido del piano...